Las Fuerzas Armadas y la Policía de Ecuador detuvieron ya a 1.534 personas al cumplirse una semana del estallido del “conflicto armado interno” contra las bandas criminales, mientras que el Consejo de la Judicatura nombró a siete nuevos jueces especializados en lucha contra la corrupción y el crimen organizado.
Al menos cinco supuestos delincuentes, declarados “terroristas” en función del decreto presidencial, murieron en operativos del Ejército y la Policía en zonas del país con altos índices de criminalidad, informó la agencia de noticias Europa Press. En lo que respecta a la situación de las cárceles, las fuerzas de seguridad indicaron en un comunicado que pudieron capturar hasta ahora un total de 27 presos que se habían fugado.
El lunes el presidente Daniel Noboa aseguró que estaban recuperando el control de los centros penitenciarios después de las últimas intervenciones. En ese sentido, se logró liberar a 200 funcionarios y trabajadores que desempeñaban sus funciones en las cárceles, así como a una decena de policías que habían sido tomados como rehenes por estos grupos, detalló el diario ecuatoriano El Universo. Según la autoridad carcelaria (SNAI), a lo largo de la semana que los narcos controlaron las cárceles, llegaron a tener 178 rehenes y 19 personas murieron.
El origen de la escalada de violencia
La crisis empezó el domingo 7 de este mes, cuando Adolfo Macías, jefe de la principal banda criminal de la nación conocida como “Los Choneros”, desapareció de su prisión en el puerto de Guayaquil, al suroeste del país. A su fuga le siguió una arremetida violenta: asesinatos, motines en las cárceles, funcionarios de prisiones, retenidos por presos, policías secuestrados, reclusos fugados, ataques con explosivos y la toma de un canal de televisión transmitida en vivo.
Cientos de soldados y policías siguen buscando al capo narco, mientras desde el lunes de la semana pasada rige un estado de excepción por 60 días en todo el país, incluidas las penitenciarias, y un toque de queda de seis horas. El Ejército de Colombia sospecha que Macías cruzó a su territorio, donde existen los mayores cultivos de coca del mundo.
Nuevos jueces anticorrupción
Mientras tanto, el Consejo de la Judicatura de Ecuador nombró a siete nuevos jueces especializados en la lucha contra la corrupción y el crimen organizado. Cuatro de ellos se incorporarán en la Unidad de Garantías Penales y tres conformarán un nuevo Tribunal, con sede en la provincia de Pichincha, cuya capital es Quito.
Con esta designación, realizada en un pleno extraordinario del Consejo de la Judicatura, Ecuador llega a los 23 administradores de justicia especializados en estas dos problemáticas que afectan al territorio. “Aportarán en el procesamiento de las causas que se han iniciado en los últimos días, por la aplicación del decreto ejecutivo 111, mediante el cual se declaró al Ecuador en estado de ‘conflicto interno armado'”, apuntó en un comunicado la Judicatura, el máximo órgano de gobierno de los magistrados ecuatorianos.
Operativo en el mar
Por otra parte, al menos 21 personas fueron detenidas en alta mar por la Armada de Ecuador cuando navegaban en un conjunto de embarcaciones con alrededor de 3,2 toneladas de sustancias sospechosas de ser droga a bordo, según informó el comandante general de la Policía Nacional, César Zapata.
La Armada ecuatoriana precisó en un comunicado que los detenidos se trasladaban en una embarcación nodriza y seis botes cargadas con 80 bultos que contendrían “sustancias sujetas a fiscalización” y cuyo destino sería Centroamérica. La interceptación de estas embarcaciones se produjo a unos 429 kilómetros de Manta, ciudad situada en la costa central de Ecuador.
Rodeado por Colombia y Perú, los dos mayores productores mundiales de cocaína, Ecuador se convirtió en los últimos años en un punto clave del tráfico mundial de esa droga, al aprovechar las mafias sus puertos y costas para enviar toneladas de cargamentos hacia Europa y Norteamérica. Esto lo convirtió también en el tercer país del mundo que más droga decomisa, solo por detrás de Colombia y Estados Unidos, puesto que superó las 200 toneladas de estupefacientes incautados anualmente, volumen que se repitió en los últimos tres años.
Muertes de menores de edad
Al compás de este crecimiento, también aumentó un 640% la tasa de homicidios de menores de edad en Ecuador en los últimos cuatro años, llegando a registrar 770 muertes en 2023 frente a las 104 de 2019, denunció mediante un comunicado el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF). “En los últimos meses, las muertes de niños, niñas y adolescentes se han disparado debido al dramático aumento de la delincuencia en varias partes de Ecuador. El reclutamiento forzoso de adolescentes por parte de grupos armados también está aumentando, y los centros de salud y las escuelas están siendo asediados”, aseguró el director regional de UNICEF para Latinoamérica y el Caribe, Garry Conille.
En este sentido, Conille se quejó de que la interrupción a gran escala de los servicios básicos en zonas controladas por estos grupos armados no sólo está poniendo a más niños en riesgo de ser reclutados, sino que también está cortando el acceso a la salud, la educación y la protección de cientos de miles de personas. Este deterioro de la situación llevó al cierre temporal de escuelas por todo el país, privando de centros educativos adecuados a más de 4,3 millones de niños y niñas, según datos compartidos por el organismo.
