Varias modificaciones al proyecto aprobado en el Senado este jueves y el respaldo de al menos un sector de Cambiemos son las demandas para apoyar la reforma judicial que se escuchan por estas horas entre los diputados de los dos bloques chicos, que supieron colaborar con el Gobierno para sancionar sus principales leyes.
Son Unidad Federal para el Desarrollo (Udeso), la bancada conducida por el mendocino José Luis Ramón; y el interbloque federal, un mix de lavagnistas, socialistas santafesinos y los cuatro de Córdoba Federal. Estos últimos confirmaron que no darán quórum por el costo político que le significaría al gobernador Juan Schiaretti.
Los demás habían anunciado que no apoyaban la reforma cuando Alberto Fernández la envió a la Cámara alta, pero no cerraron la puerta a la búsqueda de consensos. Aunque, en estricto off the record, consideran que el clima político, como está, no les permite ser garantes de la ley sin pagar un precio altísimo y por eso piden más que nunca abrir puentes con radicales o macristas. Al menos con una parte.
“Ni Alberto ni Massa pueden sacar la ley por un voto con una manifestación en las calles. Al menos una parte de Cambiemos tiene que ayudar”, coincidieron a LPO dos federales, que en estos días hablaron entre ellos y coincidieron en bajar el perfil.