Alberto Fernández dio por clausurado el debate sobre la posibilidad de un indulto o amnistía a los ex funcionarios condenados o procesados por causas de corrupción. El presidente reafirmó su postura luego de las declaraciones de Sergio Massa que generaron críticas de sectores del kirchnerismo.
Fuentes del gobierno nacional explicaron a LPO que Alberto evaluó el tema luego de leer las declaraciones de Massa al diario El País de España y ratificó que no hay ningún tipo de posibilidad de avanzar en ese sentido.
Esto es así porque la amnistía para procesados depende del Congreso, por lo que el presidente considera que los dichos de Massa clausuran totalmente esa posibilidad. El kirchnerismo no tiene los votos para aprobarlo y mucho menos sin el impulso del presidente de la Cámara.
“No veo la menor posibilidad (de un indulto o amnistía). La justicia es quien absuelve o condena. Una amnistía para los casos de corrupción sería absurda, un gran error”, declaró Massa, que además hizo saber que ni piensa poner el tema en discusión.
Alberto ya había dado por cerrada la vía del indulto, que en el kirchnerismo le reclaman especialmente para Amado Boudou. El indulto depende del presidente y mantiene su negativa total, como declaró semanas atrás.
El mandatario sostiene dos motivos para no dar lugar al indulto. En principio considera que la figura es una rémora monárquica y segundo repite que en la campaña prometió que no iba a indultar a nadie.
Las causas judiciales de los ex funcionarios son un tema muy espinoso dentro del Frente de Todos, donde hay un sector del kirchnerismo que presiona fuerte por los indultos. Ese sector casi marginal ha tenido el respaldo en algunos casos (especialmente el de Boudou y el de Milagro Sala) de figuras importantes como Axel Kicillof, Andrés Larroque o Wado de Pedro.