Mas allá de los enormes, inútiles e improductivos esfuerzos para demostrar algo diferente la temporada 2021 ya se esta esfumando en los inicios del mes de febrero; muchos de los pocos turistas que se acercaron adelantaron su regresos, un poco por la espantosa situación económica reinante, otro poco por el clima que ha resultado muy poco benévolo, pero sin lugar a dudas el peso de la bajísima convocatoria tuvo que ver con un muy mal manejo de los tiempos en la gestión adornado además con declaraciones extemporáneas del propio intendente.
Los números no dejan lugar a dudas, en casi todos los rubros se trabajó un 60-70% menos que en la temporada 2020, ¿qué fue lo que quiso aventurar Cardozo cuando habló de un 100%?, es un enorme enigma que aun no ha sido develado. hay un exceso de protagonismo virtual que inclusive se va haciendo contagioso entre algunos funcionarios, muchos (demasiados) videos y fotos en redes sociales y poco o nada de contacto con la gente real que está padeciendo los avatares de la castigada economía nacional.
El saldo está en rojo, muy preocupante, las secuelas de la temporada serán alarmantes de cara a lo que resta del año, en lugar de ponerse a trabajar a tiempo para diseñar y poner en marcha una red de contención social, alguna muchachada de la municipalidad sigue de desfiles de moda, paseos, TV y videos de instagram.
