“El cuerpo de la soldado de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), Noa Marciano, que fue secuestrada por la organización terrorista Hamas, fue recuperado por las tropas del Ejército de una estructura adyacente al hospital Al Shifa de Gaza”, informó un comunicado castrense israelí. “Tras un proceso de identificación realizado por personal médico militar y del rabinato, representantes de las FDI informaron ayer a su familia que su cuerpo fue extraído y devuelto a territorio israelí“, agregó el escrito del Ejército, que el martes había confirmado el fallecimiento de la joven soldado en manos de Hamas, el segundo hallazgo de este tipo en las últimas horas.
Aquella confirmación se produjo horas después de la difusión de un vídeo, el lunes por la noche, en el que Hamas mostraba imágenes de Marciano en cautiverio antes y después de su muerte, que, según el grupo islamista, fue causada por un bombardeo israelí sobre la Franja el pasado 9 de noviembre. El vídeo, difundido en el canal de Telegram de las Brigadas al Qasam, el brazo armado de Hamas, mostraba un mensaje en el que la soldado pedía que cesaran los bombardeos porque los secuestrados podían morir. Y luego se veían fotografías de ella aparentemente muerta, con una grave herida en la cabeza y sin un pie.
El anuncio del Ejército sobre el hallazgo del cuerpo de la joven llega poco después de que se informara que se había encontrado el cadaver de Yehudit Weiss –mujer israelí de 65 años también secuestrada– en las inmediaciones del hospital Al Shifa, donde Israel sostiene que está ubicada la principal infraestructura militar del grupo islamista. Según algunos medios israelíes, Weiss era madre de cinco hijos y recibía tratamiento médico por cáncer de mama. El día del ataque de Hamas estaba en su domicilio del kibutz Beri cuando fue capturada, mientras que su marido, Shmulik Weiss, fue asesinado.
Las Brigadas al Qasam rechazaron vía un comunicado las acusaciones israelíes de que el grupo mantuvo rehenes en hospitales de Gaza, asegurando que “transfirieron un número de ellos (a centros médicos) para que recibieran tratamiento debido a la gravedad de sus condiciones de salud”.
Más combustible para la Franja
Israel anunció que dos camiones cisterna cargados de diésel podrán entrar diariamente a Gaza desde Egipto, a través del paso fronterizo de Rafah, en una concesión ofrecida ante las presiones internacionales para que permita la llegada de combustible a la Franja, un elemento necesario para la generación de electricidad y el funcionamiento de muchos servicios civiles básicos, como los hospitales.
“El Gabinete de Guerra aprobó por unanimidad una recomendación conjunta de las Fuerzas de Defensa de Israel y del Shin Bet (servicio de inteligencia interior) para cumplir con la solicitud de Estados Unidos y permitir la entrada de dos camiones cisterna diésel al día para las necesidades de la ONU de apoyo a la infraestructura de agua y alcantarillado”, aseguró un funcionario del Gobierno israelí.
Mientras tanto un convoy de 40 camiones de ayuda humanitaria entró en la Franja a través del paso fronterizo de Rafah, por donde salieron 30 palestinos heridos que recibirán tratamiento en Emiratos Árabes Unidos, informaron fuentes humanitarias a la prensa. Un miembro de la Media Luna Roja dijo en una entrevista que esos vehículos lograron descargar suministros médicos y alimentos, mientras voluntarios y trabajadores humanitarios organizaban la carga acumulada de cerca de 150 camiones en el paso de Rafah cuando el martes la agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) paró su actividad por falta de combustible.
Desde Israel, mientras tanto, algunos políticos le siguen echando leña al fuego: el vicepresidente de la Knéset (Parlamento israelí), Nissim Vaturi, instó “a quemar Gaza” en un mensaje difundido en las redes sociales en reacción a la decisión del Gobierno de su país de dejar entrar ayuda a Gaza”. “Toda esta preocupación por si hay o no Internet en Gaza demuestra que no hemos aprendido nada. Somos demasiado humanos. ¡Quemen Gaza ahora, nada menos (que eso)!”, escribió Vaturi, del partido derechista Likud, que lidera el primer ministro Benjamín Netanyahu, en la red social X. Y afirmó: “¡No permitan la entrada de combustible, no permitan la entrada de agua hasta que los rehenes sean devueltos!”.
El avance de Israel
En el plano bélico, el Ejército israelí anunció la captura y destrucción de un importante puesto de producción de armamento del grupo islamista Yihad Islámica Palestina, en el norte de la Franja de Gaza. Según un comunicado, las fuerzas israelíes tomaron el puesto el jueves e incautaron numerosas armas que trasladaron en dos camiones, incluidas piezas de cohetes tierra-tierra Badr-3, piezas de drones y material de inteligencia del aliado de Hamas.
Durante la operación, los soldados fueron atacados desde un edificio con un misil antitanque y luego un helicóptero israelí atacó el lugar del disparo. Sin embargo, no dan cifras de bajas militares. La operación duró doce horas y el puesto estaba situado junto a un juzgado
de Gaza y un hospital turco.
Los otros frentes
En la otra punta del mapa, en Cisjordania, al menos tres palestinos murieron y otros nueve resultaron heridos a causa de un ataque israelí durante una redada en Yenín, que, según fuentes palestinas, se extendió al principal hospital de la ciudad. Además, el Ejército israelí informó de que sus tropas mataron a dos supuestos terroristas palestinos que abrieron fuego contra un grupo de soldados. “Dos terroristas llegaron hace poco en coche a la intersección de Zeit, cerca de Hebrón, y dispararon contra las fuerzas que operaban allí. Los combatientes del Batallón de Reserva 8106 dispararon y mataron a los dos terroristas”, explicó la portavoz de la policía militar.
En el frente norte de Israel, el grupo libanés Hezbolá reivindicó 13 ataques contra objetivos militares israelíes, uno de ellos con drones, lo que supone una nueva intensificación de sus operaciones en el marco del fuego cruzado que las partes intercambian desde hace seis semanas.
El movimiento armado explicó que sus acciones de este viernes tuvieron como objetivo siete “grupos de soldados israelíes”, un tanque y un destacamento de las fuerzas especiales del Estado judío. Desde el pasado 8 de octubre, la formación chiita e Israel están enzarzados en intensos ataques cruzados a través de la divisoria entre ambos países, estallido que deja ya decenas de muertos, más de 300 heridos y 26.000 desplazados internos solo del lado libanés.