Desde Río de Janeiro
Brasil vive dos decisiones en dos días, que involucran a gran parte de los brasileños. Este sábado Flamengo – el equipo que tiene la hinchada más grande – logró conquistar el título de la Copa Libertadores, en Ecuador, derrotando otro equipo brasileño, el Atlético Paranaense.
Este domingo, a la misma hora, los brasileños sabrán quién será su próximo presidente. El sábado terminó la campaña electoral más larga que el país haya conocido.
Lula hizo una gran manifestación en la Avenida Paulista, en el centro de San Paulo. Hace tres años, visité a Pepe Mujica, en su rancho, en la periferia de Montevideo. Me dijo que Lula saldría libre y volvería a ser presidente de Brasil.
Este sábado Mujica acompanó a Lula arriba de un gran coche, en medio de un clima de optimismo en la campaña de Lula, aún más después de que unanimemente los medios han definido que Lula ha ganado el ultimo debate de la campaña, el viernes por la noche, en TV Globo.
Ventaja para Lula
Las encuestas confiables han presentado sus últimos resultados, todas con previsión de victoria de Lula, con ventaja de entre 4 y 8 puntos. Todas las encuestas han convergido para arrojar resultados parecidos. Aún así, la ansiedad domina a todos, especialmente porque los dos candidatos le hablan a países muy distintos, con plantemientos radicalmente contrapuestos.
En el debate, una vez más, como en los últimos tiempos, Bolsonaro se ha presentado muy descontrolado y agresivo, como si se hubiera dado cuenta que era su última oportunidad para revertir las previsiones que apuntan a una derrota suya.
Imagen de estadista
Lula se mostró muy optimista, pero sobre todo con una imagen de estadista, centrando sus intervenciones en las propuestas que presenta para rescatar a Brasil de la peor crisis de su historia. Ha enfatizado que, en caso de ser eligido, se propone a hacer un programa de reconstrucción, en los próximo cuatros años, y que él se compromete a que sea su último mandato como presidente de Brasil.
Los dias son de sol. Se votará de forma mas rápida que en la primera vuelta porque hay menos cargos en juego. Se supone que al final de la tarde ya se podrá tener los resultados, a lo mejor con la misma ansiedad de la primera vuelta, porque el conteo empieza por el sur, el reducto fuerte de Bolsonaro, mientras que le resultado definitivo llegará con los votos de Lula, que la otra vuelta le permitió revertir la ventaja inicial de su rival.
Después de esa primera vuelta Lula siguió siendo favorito en todas las encuestas y la expectativa es que, probablemente, su favoritismo se confirme este domingo, 30 de octubre de 2022.