La Dirección General de Aduanas (DGA) y la Justicia Federal investigan a la pesquera Agropez, del grupo Conarpesa, respectivamente por la presunta subfacturación de exportaciones de langostinos a China y España y por haber realizado operaciones a través del financista Ivo Rojnica, conocido como “El Croata”.
Fuentes oficiales revelaron que los “vehículos” para la subfacturación, vía triangulación de ventas al exterior y pagos de servicios ficticios a firmas supuestamente extranjeras, “se concretaban a través de empresas que habían sido creadas y funcionaban en la red del Croata” y que las operaciones que están bajo investigación, son exportaciones que ascenderían a US$ 53 millones.
Las prsuntas maniobras
“El mecanismo utilizado para la evasión de las divisas en el caso de las ventas de Agropez, era la ‘triangulación’ de las operaciones a través de una empresa uruguaya denominada Vantrey, con domicilio en Juncal 1.378, Edificio Torre X, de Montevideo, en Uruguay, que se utilizaba para re-facturar todas las ventas a China y España”, agregaron.
También indicaron que “Agropez giraba al exterior pagos por facturas que recibía de dos empresas vinculadas al croata Rojnica, ambas registradas como firmas de Hong Kong”.
Al respecto, precisaron que “Gorlay Consulting Group le facturaba a Agropez ‘comisiones por venta en el exterior’ y M-East Manegement, por ‘servicios de gestión y logística'”.
“En ambos casos, vinculaban la facturación a cada operación que la empresa pesquera concretaba en el exterior”, señalaron.
Las fuentes plantearon que “en el caso de Gorlay, la Justicia comprobó que la empresa estaba inscripta como cliente de Blackthorn Finance, la compañía de servicios financieros internacionales a través de la cual se concretaban las transferencias al exterior”.
“Por otra parte, todos los fondos transferidos al exterior terminaban en una cuenta administrada por el croata en el OCBC Bank de Singapur (Oversea – Chinese Banking Corp)”.
La preventiva a Rojnica
La semana pasada, el juez federal de Lomas de Zamora, Federico Villena, procesó con prisión preventiva a Rojnica como presunto jefe de una asociación ilícita dedicada al lavado de activos y resolvió enviar la investigación a su par porteño Marcelo Martínez De Giorgi.
Este último magistrado ya estaba investigando a Rojnica por manejar una “cueva” en el microcentro porteño, pero se había negado a detenerlo por no existir a su criterio riesgos procesales.
Villena procesó a Rojnica y a otro de los acusados, Federico Pulenta, como “coautores” de asociación ilícita en calidad de jefe, lavado de activos e intermediación financiera no autorizada.
En cuanto a un tercer detenido en la causa, Agustín Estrada Palomeque, se le dictó falta de mérito y se dispuso su “inmediata libertad”, aunque seguirá bajo investigación.