Bajo presión directa de Washington, Israel dio marcha atrás este martes en su decisión de cortar la señal en vivo de la agencia de noticias estadounidense Associated Press sobre Gaza, devastada por más de siete meses de guerra contra el movimiento islamista palestino Hamás.
“Ordené anular la decisión y devolver el equipo a la agencia AP”, declaró el ministro israelí de Comunicaciones, Shlomo Karhi, poco después de haber ordenado el corte de las transmisiones en vivo por supuesta violación de la nueva ley de medios, ya esgrimida recientemente para cerrar la televisión catarí Al Jazeera.
La Casa Blanca había expresado durante el día su preocupación por el corte de la señal de AP y pedido a las autoridades israelíes que la restablecieran. “Estamos en contacto directo con el gobierno israelí para expresar nuestra preocupación por esta decisión y pedirles que la reviertan”, declaró un vocero del gobierno estadounidense.
“Associated Press condena en los términos más enérgicos las acciones del gobierno israelí para cerrar nuestra transmisión en vivo”, que mostraba una vista de Gaza, y “la confiscación de nuestro equipo”, indicó la agencia de noticias en un comunicado.
La agencia atribuyó la decisión a “un uso abusivo por parte del gobierno israelí” de una ley votada a inicios de abril que autoriza prohibir la transmisión en Israel de medios extranjeros acusados de socavar la seguridad del Estado.
“AP cumple las normas”
El ministerio de Comunicaciones de Israel había alegado en un comunicado que AP tomaba regularmente fotos de la Franja de Gaza desde el balcón de una casa en Sderot, en la frontera con el enclave palestino, “incluso enfocando las actividades de soldados (israelíes) y de su localización”.
Karhi indicó, al anunciar la revocación de la medida, que el ministerio de Defensa “desea examinar el asunto de la retransmisión (…) en relación con el riesgo” para las tropas israelíes que operan en Gaza.
La censura militar israelí prohíbe publicar imágenes o informaciones que puedan facilitar la localización de soldados o de instalaciones militares. “AP cumple las normas de censura militar de Israel, que prohíben retransmitir detalles como movimientos de tropas que puedan poner en peligro a los soldados”, sostuvo la agencia.
El ministerio israelí de Comunicación acusó además a Associated Press de “infringir la ley” al permitir que Al Jazeera “recibiera sus contenidos”. AP replicó que la cadena catarí es “uno de los miles de clientes de las transmisiones de video en directo enviadas por la agencia”.
Al Jazeera dejó de emitirse en Israel este mes después de que el gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu votara a favor de cerrarla por su cobertura de la guerra de Gaza.
Condenas
La ONU calificó de “terrible” la cancelación de AP, que “debería poder cumplir con su trabajo libremente y sin cortapisas”, declaró Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres.
La organización de defensa de los periodistas Reporteros Sin Fronteras (RSF) tachó la decisión de las autoridades israelíes de “censura escandalosa”.
El director mundial de noticias de la agencia francesa Agence France-Presse (AFP), Phil Chetwynd, estimó que la decisión de Israel constituía “un ataque a la libertad de prensa”. “La libre circulación de informaciones e imágenes verificadas procedentes de fuentes fiables es vital en el actual contexto”, declaró Chetwynd en un comunicado.
El líder de la oposición israelí, Yair Lapid, reaccionó a la decisión en X, diciendo que el gobierno “se volvió loco”. “Esto no es Al Jazeera, es un medio de comunicación estadounidense que ha ganado 53 premios Pulitzer”, escribió.