Miles de niños y adultos participaron este domingo de las actividades de cierre de la temporada 2022 de la mega muestra de Tecnópolis, el predio ubicado en la localidad bonaerense de Villa Martelli, que fue visitada este año por más de tres millones de espectadores.
Los miles de visitantes aprovecharon la jornada soleada de domingo para visitar la muestra en el predio de la avenida Constituyentes, localidad de Villa Martelli, partido bonaerense de Vicente López, con entrada libre y gratuita, sin reserva previa, organizada por el Ministerio de Cultura de la Nación.
La edición 2022 de Tecnópolis se desarrolló durante 57 jornadas, desde el 17 de julio pasado, durante los cuales la megamuestra de arte, ciencia y tecnología más grande de Latinoamérica recibió a más de 3 millones de visitantes de todo el país, se informó oficialmente.
“Más de 800 mil personas de todo el país disfrutaron del Parque en solo dos semanas. Desde agosto, volvieron los recorridos con escuelas, en los que participaron más de 300 mil chicas y chicos de 5 mil escuelas”, agregó un comunicado del Ministerio de Cultura.
“Tecnópolis, el parque dedicado a la ciencia, la tecnología y el arte, fue concebido desde su nacimiento como un espacio de conocimiento, aprendizaje y disfrute para toda la familia. Un lugar para el entretenimiento pero también un posible encuentro con futuras vocaciones. Nos da una alegría inmensa y un gran orgullo ver cómo ese sueño inicial hoy forma parte de la experiencia de más de 3 millones de visitantes que lo recorrieron y disfrutaron en esta última edición”, señaló el ministro de Cultura, Tristán Bauer.
“Llevar adelante este Parque, con la calidad y variedad de propuestas que tiene, implica un gran esfuerzo y compromiso. Vaya, entonces, un agradecimiento especial para todos aquellos que trabajan en él, que lo cuidan, sostienen y abrazan cada día. También a los Ministerios, organismos, empresas públicas y privadas y a la cooperación internacional de los países que participaron este año. Todos y todas hacen de Tecnópolis una experiencia única e inolvidable”, agregó el funcionario nacional.
En esta oportunidad, uno de los espacios más concurridos fue la “Experiencia Arrorró”, un espacio sensorial para niños de hasta cuatro años, donde una gran cantidad de personas hacían fila para poder participar de esa muestra interactiva.
Sonia González, vecina del barrio porteño de Versalles y madre de Valentina, de tres años, señaló a Télam que le gusta que haya “un espacio de aprendizaje para los más chicos” y que siempre es “necesario que haya más espacios como estos”.
Otro de los espacios más visitados fue el Azul, la muestra interactiva que se desarrolla en el polo rojo de Innovación, que revela las curiosidades de la vida marítima en el Mar Argentino.
Aurelio, divulgador científico de la sección, dijo sentirse “orgulloso de que muchas personas se acerquen al stand y hagan preguntas sobre nuestra fauna marina y sobre los perjuicios que pueden provocar el desperdicio de desechos a nuestros mares”.
En esta misma línea, una gran cantidad de personas hacían fila para escalar en la palestra, un muro de 8 metros de altura y puntos de apoyo que definen los caminos de la escalada.
Mayra, una joven de 15 años, afirmó que “subir a la palestra genera una sensación de vértigo y adrenalina, que es muy difícil de lograr con otras actividades”.
En esta misma línea, dentro del Pabellón 2, una de las muestras más concurridas de la jornada era “América Viva” y, en especial, la sección de las obras que representan la historia de los mitos y leyendas de los pueblos originarios de nuestro país.
Andrea, vecina del municipio de Lomas de Zamora, afirmó que “la sección es muy interesante para aprender sobre la cultura de nuestros pueblos originarios que no es muy visibilizada”.
Otra de las áreas con mayor afluencia de personas fue el sector de Zamba, un espacio interactivo donde, a través de ayuda de los personajes de la serie infantil, se permite a los niños conocer sobre la historia del país.
Enzo, un nene de 8 años oriundo de la localidad formoseña de Clorinda, que llevaba una camiseta de Zamba, señaló que “es la primera vez” que visitó Tecnópolis y que lo que más le gustó fue “visitar la zona de la ballena gigante”.
En el pabellón del Ministerio de Educación, los visitantes participaron de los diferentes puestos como los dedicados al programa conectar igualdad, el área de lectura infanto juvenil y el puesto dedicado al Instituto Nacional de Educación Tecnológica, en donde los visitantes podían utilizar el simulador de automóvil, una experiencia interactiva que imita la experiencia de conducir.
Mateo, un joven de 11 años oriundo de Boulogne, que estaba en la fila del simulador, consideró que “toda la muestra es muy buena y puede ser entretenida tanto para niños y no tan niños”.
Otro de los espacios más visitados fue Plaza Siquier, en donde se dictaron talleres de malabares y Equilibrio, y niños y adultos aprendieron a realizar malabares junto a payasos y acróbatas.
Llenos de brillo y maquillajes, los participantes intentaban realizar malabares con pelotas multicolores.
Guido, un joven de 16 años de Berazategui, indicó que “a simple vista es fácil hacer malabares, pero la verdad es muy complicada. Tienes que tener coordinación y una gran rapidez en la mano. Después de 40 minutos pude aprender a realizar malabares con tres pelotas, pero me cuesta mucho”.
A las 16, en el escenario Juana Azurduy, niños y niñas participaron del gran baile de Zamba y Niña, en donde pudieron jugar y cantar junto a los personajes.
Luego, en el mismo escenario se presentaron “Los Rockan”, una banda que propone un recorrido rockero de las canciones más emblemáticas de María Elena Walsh, en un espectáculo intergeneracional, que movilizó a niños y grandes con sus acordes.
A las 17, en Auditorio Cultura, Martín Rechimuzzi y Pedro Rosenblat realizaron su programa en streaming con público en vivo.
Mientras que a las 18, cerca del cierre, en el Patio Federal, la banda Kapanga movilizó al público con su fusión de cuarteto, rock y ska.
La directora de Tecnópolis, María Rosenfeldt, anticipó que la próxima edición de la muestra arrancará en febrero de 2023, para la cual trabajarán “con mucho entusiasmo y muchas ideas para renovar y para seguir poniendo en valor este espacio, esta política pública, cultural y educativa”.