Las autoridades de Nueva York anunciaron este jueves dos nuevos decesos por la ola de frío en Estados Unidos. De esta manera, la cantidad de muertos por las inclemencias climáticas superó las 60 personas en medio de duras críticas a la respuesta del servicio de emergencia contra el temporal.
Asimismo, la gobernación de Búfalo, la ciudad más grande de Nueva York, eliminó la prohibición de conducir por carreteras que estuvo vigente durante seis días y se retomó la actividad en los comercios esenciales.
Sin embargo, el distrito se prepara para posibles inundaciones en los próximos días ante el aumento de temperatura. Mark Poloncarz, el titular del condado de Erie -lugar en el que se contabilizaron más muertes (39)- aseguró que las crecidas serán “mínimas” y se lamentó: “Demasiadas personas han muerto“.
Sin contar a Nueva York, se registraron al menos 25 muertes en 11 estados, según informó la cadena de noticias CNN. No obstante, las cifras crecen a cada minuto a medida que las entidades que realizan un seguimiento de la situación notifican nuevos decesos.
Los efectos catastróficos de la tormenta Elliot, que tuvo su pico en el fin de semana de Navidad, afectaron sobre todo a los distritos de Maine, Nueva York, Virginia, Washington y Vermont.
La gobernadora Kathy Hochul aseguró que se trata de la tormenta “más devastadora” en la historia de Búfalo, donde cayeron 100 centímetros de nieve.
La situación provocó cancelaciones en miles de vuelos. Hasta este jueves, el número de viajes suspendidos ascendía a más de 4 mil, más de la mitad de ellos de la compañía Southwest.